Marsha May aspira una polla enorme y se la follan profundamente

Aprender a obedecer. Marsha estaba preparando un sándwich para su hombre cuando se dio cuenta de que lo había jodido a lo grande - le ponía mostaza al pan cuando a él no le gustaba la mostaza - también eran los últimos trozos de pan que tenían. Marsha se arrastró hacia su maestro y se disculpó, ¡pero no fue suficiente! ¡La agarró por el pelo, la abofeteó y le ordenó que le besara los pies! Marsha se inclinó como una buena puta y recibió una paliza de su cinturón antes de que se llenara la boca con su gigantesca polla, ¡haciéndola llorar! Marsha fue dominada por su hombre: ¡follada, azotada, estrangulada, escupida y amortiguada con sus propias bragas! ¡Se disculpó todo el tiempo que fue disciplinada! ¡Marsha recibió su carga por toda la cara para rematarla!